“James, ¿pudieras orar que los miembros de nuestra iglesia estén dispuestos a tener conversaciones incómodas unos con otros?”.

“¿Qué?”.

En serio, esto es lo que mi pastor les pide a los miembros que oren casi cada semana en nuestro culto vespertino del domingo. Juntos, pedimos que los miembros comprendan la necesidad de hacer que nuestras relaciones sean transparentes —que compartamos cosas embarazosas acerca de nosotros mismos, que hablemos con honestidad, y que nos hagamos preguntas cuidadosas y amorosas como un medio de cultivar una genuina cultura de discipulado—.

¿QUÉ ES LA TRANSPARENCIA?

La palabra transparencia no se encuentra en la Biblia, pero muchos pasajes bíblicos exhortan a cristianos a vivir vidas santas e irreprensibles.[1] Jesús dijo: “si ustedes me siguen, no tendrán que andar en la oscuridad porque tendrán la luz que lleva a la vida” (Jn. 8:12 NTV). Transparencia es vivir nuestras vidas reflejando la luz de Jesús debido a que reconocemos nuestra necesidad de recordar el Evangelio, rendir cuentas y arrepentirnos.

EL PROBLEMA DE LA PORNOGRAFÍA

Sin embargo, la transparencia es difícil porque los cristianos siguen pecando y sintiendo culpa. La pornografía es solo un importante ejemplo de la lucha continua de la humanidad con la oscuridad. Tristemente, un sinnúmero de cristianos ha sucumbido ante la pornografía de manera regular —y los pastores no son la excepción—. Las consecuencias de este pecado en la iglesia son devastadoras: pastores descalificados, matrimonios destruidos, familias divididas, y misiones detenidas.

HACIA UNA SOLUCIÓN

¿Cómo puede una iglesia local cuidar de aquellos que están bajo su cuidado del poder de esta grave epidemia? Vamos a considerar la transparencia como una postura, una práctica, y una prevención contra la pornografía.

TRANSPARENCIA: UNA POSTURA DE HUMILDAD

Cuando hablamos de pornografía, el orgullo tiene una manera de hacer que las personas sobreestimen su fuerza. El orgullo te hace pensar que tienes el control. Te aleja de admitir que tienes un problema o instalar filtros al internet. El orgullo es la razón por la que titubeas para confesar tus pecados a Dios y a otros. El orgullo te hace terco. Proverbios 11:2 dice: “El orgullo lleva a la deshonra…”.

Por tanto, la Biblia nos da una alternativa: “… pero con la humildad viene la sabiduría”. La transparencia requiere humildad.

Desde el púlpito, nuestros miembros son instruidos en que el amor bíblico conlleva confrontación. Igual que Jesús, en su humildad, confrontó nuestro pecado (Fil. 2:5-8 NTV), somos instruidos en los beneficios de la disciplina formativa y correctiva de la iglesia. Además, nuestros ancianos ejemplifican el dar y recibir críticas y exhortaciones piadosas, especialmente en nuestro servicio semanal de evaluación. En conjunto, estas disciplinas cultivan una cultura de invitar a la retroalimentación y crítica con el propósito de crecer en santidad.

Qué gran regalo nos ha dado Dios en tener personas en nuestras vidas que nos aman a través de la enseñanza y la corrección. ¿Hay una mejor forma de declarar la guerra contra el orgullo y la pornografía en la iglesia local que fomentar la humildad cristiana a través de la enseñanza y el ejemplo bíblico? Una postura de humildad es el primer paso hacia la batalla contra el problema de la pornografía en la iglesia local porque la humildad nos dirige hacia la confesión (Mt. 5:3-4 NTV).

TRANSPARENCIA: UNA PRÁCTICA DE RENDICIÓN DE CUENTAS

La transparencia es un medio y un fruto de la piedad. Esto significa que necesitas desarrollar el “músculo” de la transparencia (Ef. 4:29 NTV). ¿De qué sirve la humildad si no perseveras rindiendo cuentas (Stg. 1:3 NTV)? ¡Avanza! (Fil. 3:14 NTV).

Gracias a Dios, encontramos una verdadera rendición de cuentas a través de la iglesia local. ¿Tu iglesia se hace responsable de tu profesión de fe? ¿Te ayuda a confesar tus pecados?

Una membresía eclesiástica significativa es el diseño divino para la rendición de cuentas cristiana.[2] Los miembros de la iglesia están comprometidos contigo, y ancianos bíblicamente cualificados darán cuentas por ti (He. 13:17 NTV). Considera los beneficios de la membresía local: una iglesia local afirma tu profesión de fe; invierte en tu discipulado; te enseña, corrige, y aconseja cuando pasas por dificultades; te ama; y ora por ti.

Esta es al menos una razón por qué nuestros ancianos regularmente guían a nuestros miembros a reflexionar en el pacto de nuestra iglesia y recitarlo antes de cada Santa Cena y reunión de miembros. Queremos que los miembros recuerden el pacto que han hecho ante Dios y los unos con los otros.

¿Tu entendimiento de la “rendición de cuentas” incluye la membresía eclesiástica? Incluso, ¿la membresía de tu iglesia está estructurada de tal forma que atraiga a los no cristianos, moleste a los cristianos nominales, y se les apetezca a los cristianos hambrientos?

La rendición de cuentas mediante la membresía de la iglesia es un paso extremadamente importante al luchar con el problema de la pornografía. Ayuda a los cristianos a caminar en la luz y el compañerismo con el pueblo de Dios (1 Jn 1:7 NTV), que engloba tanto una genuina confesión como una dirección final hacia el arrepentimiento genuino (2 Co. 7:10 NTV).[3]

TRANSPARENCIA: PREVENCIÓN MEDIANTE CORRECCIÓN AMOROSA

Entonces, ¿cómo es que una iglesia local previene que la pornografía cause su efecto completo en la vida de sus miembros? ¿Cómo es que una iglesia local se protege los unos a los otros del engaño del pecado?

Algunos podrían sorprenderse al encontrar que la Biblia provee una clara respuesta. 1 Corintios 5:4-5 nos instruye qué hacer con un hombre en la iglesia en pecado impenitente: “Ustedes deben convocar a una reunión de la iglesia. (…) Entonces deben expulsar a ese hombre y entregárselo a Satanás, para que su naturaleza pecaminosa sea destruida y él mismo sea salvo el día que el Señor vuelva”.

Este pasaje nos enseña que la iglesia debe juzgar a aquellos que están dentro (1 Co. 5:12-13 NTV) a través de un proceso de corrección amorosa (Mt. 18:15-18). ¿Para qué lo hacemos? Para que sus almas puedan ser preservadas en el día final. Por el bien del amor, las iglesias locales debes ejercitar una amorosa corrección corporativa como un medio de prevenir la impenitencia.

En nuestra iglesia, hemos visto que la corrección amorosa produce fruto glorioso. Hemos visto miembros confesar sus pecados con humildad y tomar pasos hacia el arrepentimiento. Hemos visto hermanos renunciar al diaconado o al ser anciano o, incluso, a la oportunidad de salir con alguien; hemos visto hermanos dejar el pastorado por un tiempo porque están luchando con pornografía u otros pecados. Al hacerlo, han modelado transparencia a través de disciplina y rendición de cuentas. Estos hermanos son objetos de la misericordia de Dios (Pr. 28:13 NTV) y de gracia sobre gracia (Jn. 1:14, 16 NTV).

Después de todo, los beneficios del arrepentimiento son muy superiores a las consecuencias del pecado. Si estás luchando con la pornografía, debes saber que el perdón de Jesús es verdadero y está disponible para ti.

CONCLUSIÓN

Jesús se dio a sí mismo por la iglesia (Ef. 5:25 NTV). Él murió para santificar a la iglesia (5:26 NTV), y Él la presentará en su esplendor sin mancha, arruga, ni defecto (5:27).

Por lo tanto, Jesús no está sorprendido por el gran alcance de la industria pornográfica; Él no está sorprendido por tu pecado. De hecho, Él ofrece perdón, misericordia, gracia, y amor a todos. Pido a Dios que puedas experimentarlo a través de tu iglesia.

[1] Referencia: Efesios 4:25; Salmo 139:23-24; 1 Pedro 2:12; Hebreos 4:13; 2 Timoteo 2:15; Filipenses 2:15; Proverbios 28:13.

[2] Referencia: Twelve Reasons Why Membership Matters.

[3] Un muy útil sermon sobre la confesión por uno de nuestros ancianos que me ayudó a pensar mucho en este tema: Elders Talk – Transparency.

James Choi es un anciano en Capitol Hill Baptist Church. Trabaja para Baptist Convention de Maryland/Delaware.

Publicado originalmente en www.9marks.org. Este artículo ha sido traducido y usado con permiso.

Este artículo pertenece a una serie de artículos sobre la pornografía, el pastorado y la iglesia. La serie completa estará disponible próximamente en 9Marks en español.